lunes, 28 de septiembre de 2009

La cara sur del Perito Moreno

El día amanece menos nublado que ayer, pero seguimos madrugando bastante. Por el camino nos encontramos con unos cuantos cóndores, pero están demasiado lejos, y mi teleobjetivo no es demasiado bueno.




Se trata de repetir un poco la excursión de hace dos días, solo que sin mini-trecking y con más pasarelas. Ya me lo habían advertido, pero no sé cuándo podré volver por aquí, y no me importa verlo de nuevo.


El barco es más grande y está atestado de gente, pero no nos dejan salir a cubierta. No obstante, por si acaso, tomo posiciones junto a la escalera. Mi enfado desaparece pronto, cuando nos permiten subir.



Las nubes acuden pronto a hacernos compañía. Y eso que no las habíamos llamado…






La experiencia es un grado, y sé de sobra que la mayoría de la gente sólo quiere hacer un par de fotos para decir que estuvieron allí. Conseguido su objetivo enseguida se retiran al interior del barco, así que sólo hay que tener paciencia. Pronto quedamos una docena disfrutando de las vistas.


Podemos recrearnos tranquilamente en los detalles.




En vertical y en horizontal. Aún hoy, al ver de nuevo las fotos, me parece imposible haber estado allí.



Aún me queda medio día en las pasarelas, pero no puedo evitar pensar que seguramente, esté observando esta maravillosa vista por última vez.


jueves, 24 de septiembre de 2009

La cara norte del Perito Moreno

Volvemos a encontrarnos con nuestro viejo amigo, esta vez por su cara norte, que nos han ofrecido como compensación por no habernos podido llevar hasta los glaciares Upsala y Onelli.

En la foto se puede comparar el tamaño del barco comparado con la pared de hielo.



Ésta es una panorámica de los tres kilómetros que tiene de lado.


Seguimos esperando un desprendimiento espectacular que no se produce.





Lo único que conseguimos ver es esto. Puede parece pequeño, pero si tenemos en cuenta que la ola sube hasta la mitad de la altura del glaciar entenderemos mejor por qué nos mantenemos a una distancia prudente.



viernes, 18 de septiembre de 2009

De regreso

Ahora toca deshacer el camino. Son muchas las horas de barco y se nota que cada vez hay menos gente en las cubiertas. Debe ser que ya tienen sus fotos y no desean pasar más frío. Nosotros en cambio, seguimos admirando maravillados el paisaje, conscientes de que no hay nada igual por nuestra Europa.



Algún trozo más azul destaca entre la barrera de témpanos.



El glaciar hurtado por la naturaleza visto desde lejos.


Formas caprichosas, irrepetibles.



Goteo continuo.



Una familia de rocas que no pretendía viajar tanto.


Y un diamante azul.

domingo, 13 de septiembre de 2009

Glaciar Spegazzini

Seguimos dentro del Parque nacional de los Glaciares. Puesto que no hemos podido acceder a los Glaciares Upsala y Onelli, nos ofrecen el Spegazzini como compensación, así que dejamos el brazo principal del lago y avanzamos por otro más pequeño.


Su anchura es más o menos de kilómetro y medio y debe su nombre a Carlos Luis Spegazzini, un famoso botánico italiano.





Estuvimos un buen rato observándolo, de modo que pudimos sacar una buena colección de fotos desde todos los ángulos.


El color del hielo era un poco menos azul que en la foto. No sé por qué, al comprimirla se saturan los colores.







Pudimos ver un desprendimiento, pero demasiado pequeño para nuestro gusto.


El tiempo se nos pasó en un vuelo, y pusimos proa hacia la cara norte del Perito Moreno.