Como he sido un chico bueno, he madrugado, y me he desplazado en mi propio auto, ahora tengo tiempo para pasar por Punta Walichu. La verdad es que llegué por los pelos, a punto de que cerraran, pero puse mi mejor cara de niño bueno, les dije que era mi último día en la Patagonia y me dejaron pasar.
El museo al aire libre está junto al Lago Argentino apenas unos kilómetros antes de El Calafate, y tiene algunas pinturas rupestres, aunque la mayoría son reproducciones.
Las nubes han vuelto, ya os dije que hoy terminaría lloviendo. Cualquiera diría que estamos en verano. La tarde se oscurece por momentos.
Pero yo a lo mío…
Sigo creyendo que tenemos en Europa pinturas rupestres infinitamente mejores, pero no era cuestión de desaprovechar la oportunidad de ver las de allí. En este caso jugamos con ventaja. Me quedé con ganas de ver la Cueva de las Manos, pero no hubo tiempo para más.
